jueves, 19 de mayo de 2011

LA BELLEZA DE LA VERDAD

Decía José de Diego que “quien busca la belleza en la verdad es un pensador; quien busca la verdad en la belleza es un artista”.
En un país, en un entorno cercano, donde habita la indecencia de la mentira (podría definirse el espacio público de la modernidad como el espacio de la pillería y de la mentira, no sólo como medio para alcanzar los objetivos deseados, sino como fin en si mismo: mientras más pillo y más mentiroso se es, más prestigio social se tiene), tengo obligatoriamente que sobrevivir con la lucidez de otros; aquellos antepasados nuestros que ya vislumbraron que el pensamiento humanista nos hace dignos de vida y que la verdad de la belleza nos sublima como seres inteligentes.

Y todo ello, por necesidad; para sobrevivir frente a la barbarie, la brutalidad y la fullería de esta modernidad que nos envilece y deteriora hasta lo más oscuro y profundo de nuestras miserias más banales.

Por todo ello, busco siempre la belleza de la verdad; una verdad que llega a ser sublime cuando alcanza la ternura de su hermosura...
Como estos sonidos de Chano Dominguez, hermosos por verdaderos y verdaderos por humanos...

http://www.goear.com/listen/8f9efcb/alma-de-mujer-chano-dominguez

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