martes, 12 de abril de 2011

CERCA DE ASTURIAS


10:15 horas
En unos minutos saldré hacia Ortigueira, Cariño, Viveiro, Foz y Ribadeo, a los pies del rio Eo, rio frontera con Asturias. . .
 Espero tener la calma y el sosiego suficientes como para que la belleza de lo que me espera por vivir no acabe con mi vida: me puedo morir de asombros!!!!
Que mis dioses me protejan. . . Va por ustedes "tos".
12:30 horas
Estoy en el Porto de Ortigueira; el navegador me trajo por montañas imposibles. Colgaré fotos, esta tarde-noche...
Ortigueira es bellísimo, y cada verano tiene lugar un festival de músicas. Mi sobrino Modesto, entonces estudiante, ganó el concurso de cartel de no recuerdo bien qué año. Por entonces, los ayuntamientos tenían buenos presupuestos y disponían de partidas para la cultura. Mi sobrino Modesto es diseñador gráfico, pero para nosotros, su familia, es un ser especial y todo un referente de fortaleza y hermosura humanas... 
Besos, sobrino, desde esta Ortigueira triste de mar en nieblas grises; quizá su verdadera cara, la más gallega.
15:45 horas
Comiendo en el puerto de Foz. Hace una enorme ventolera. Mejillones en vinagreta y un pescado de roca al horno con patatas cocidas al modo gallego. ¡Prodigioso! ¡Y el pan, yo creo que restos del milagro aquel de Jesús, el de Nazaret, que los multiplicó tanto que ha llegado hasta Galicia hoy... Si vierais lo hermosos que son estos paisajes!!! Tomaré otro café en el parador de Ribadeo. Desde allí volveré a sentir la vida... Soy feliz sabiendo que vivo y no pido más; quizá un poco-mucho de cariño, como la aldea marinera que atrás he dejado.
E la nave va...

-Mejillones con una vinagreta prodigiosa.
-Pescado de roca (me recuerda la caballa) al horno con patatas cocidas al modo gallego
-Fresas con nata y chocolate.
-Vino Ribeiro y cafe

Voy a pagar y era un menú: 10,00 €. Definitivamente, de Galicia regreso creyente en el Dios de los hebreos...

17:10 horas
Parador de Ribadeo. Enfrente de la terraza donde tomo café y aguas minerales, Castropol (Asturias), separado de Ribadeo, de las terrazas de este indiano parador, por el delta del rio Eo. Ya antes he visitado la Playa de las Catedrales; soplaba tanto el viento que apenas me sostenía de pie; y entre tanto acantilado catedralicio y tanto vértigo como el que padezco, los vientos parecieran demonios incitándome a la caída libre en abismos imposibles de vida... ¡Cuánto me asustó siempre la naturaleza en sus embrutecidas formas sobre determinados lugares de la tierra!; como estos lugares norteños, tan sobrios como fuertes; tan asombrosos como propensos al terror y la muerte... Rudas tierras, pero hermosas. Sí, todo un contraste por donde no olvido...
Como tampoco olvido que cada día nos queda menos tiempo para jugar...

De regreso lo haré por Vilalba, de donde es Fraga. De aquí, de Ribadeo, era Leopoldo Calvo Sotelo, Y de Ferrol, donde regreso en horas, era Franco. Pasaré antes de entrar en Ferrol por Mondoñedo, donde el Obispo, pero para echar un recuerdo a Cunquiero, de donde era, y para así olvidar tanto facherío en esta tierra tan prodigiosa. Resaltar cómo ya desde Foz y Ribadeo se ven por los campos las famosas casas-mansiones de los llamados indianos, aquellos que emigraron al dorado y regresaron: tanto Asturias como Galicia son territorios de emigrantes que al regresar invierten en mansiones: vuelven triunfadores; si no triunfan, no regresan, mueren en el exilio económico, como otros lo hicieron en el exilio político, como Castelao o Curros Enriquez, el poeta que murió en Cuba; aquel de las cantigas, aquel de Unha noite na eira do trigo.

20:12 horas
Hace una media hora entraba en el Hotel Hesperia-NH de Ferrol. Fundido de viento; fundido de monte; fundido de mar...
¡Qué hermosa es Galicia!

http://www.goear.com/listen/96ec07d/unha-noite-na-eira-do-trigo-pucho-boedo-los-tamara

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentarios