EL PSOE NO ES UN PARTIDO ASAMBLEARIO

No termino de entender qué ocurre en este país; pareciera que todos nos hemos vuelto locos; bueno, unos más que otros...
Desde el pasado 20 D no hay día, hora, minuto, que no salga alguien diciéndole a Sánchez lo que tiene que hacer; desde medios de comunicación, a barones actuales y elefantes del pasado; algunos, como yo, que no represento nada ni a nadie, lo que hacemos es analizar lo que puede pasar, pero de ahí a decirle yo, ni nadie, lo que tiene que hacer el Sr. Sánchez va un trecho largo e impresentable...
Al mismo tiempo, y al modo contraposición a barones y elefantes, muchos militanets están pidiendo firmas para solicitar del Comitñé Federal próximo en horas el que se consulte a 'las bases', dicen, sobre los posibles pactos de gobierno...
A ver, desde que uso y abuso de mi razón nunca el PSOE ha sido un partido asambleario, al modo manipulador de los que van de asamblearios; siempre ha sido un partido representativo, donde se debate internamente y se elige una dirección que es la que dirige al partido en el ámbito para el que ha sido elegida aquella dirección. Y es curioso: que yo recuerde los pactos en Andalucía del PSOE para con el PA o para con IU de Gobierno, o el reciente de Susana Díaz para la investidura con Ciudadanos, que yo recuerde, digo, no se consultó con 'las bases', ese eufemismo recurrente siempre como reclamando más democracia cuando en verdad lo que se está explicitando es una forma de condicionar decisiones que sólo corresponden al órgano competente... Y, como vengo sosteniendo desde hace años, los partidos no son de sus militantes; los partidos políticos democráticos españoles, así lo dice y exige la Constitución, son instituciones para la participación política; una participación política para este nuestro régimen parlamentario, es decir, representativo, como es el nuestro. Los partidos políticos no son, por tanto, patrimonio de sus militantes y por eso reciben subvención pública, para su mantenimiento y sostén; partidos que son los encargados de canalizar aquella participación política para elegir a un Parlamento, que a su vez elija al Gobierno de España.

Por tanto, dejemos actuar a quien corresponde tomar las decisiones y a los órganos elegidos para ello; órganos, en el caso del PSOE, elegidos tan democráticamente que su primer ejecutivo lo fue a través de primarias frente a dos candidatos más...

A veces este país lo complica todo tanto!!!