Es curioso... El tener una edad cierta, que no cierta edad, como decía un querido compañero de la empresa a la que he dedicado los mejores años de mi vida, tiene sus ventajas: uno ya ha visto de casi todo y cómo casi todo se repite y, casi siempre, por las mismas razones; pero esta constante repetición de comportamientos y de reacciones humanas no impiden que cada vez que vuelven a aparecer me produzcan una cierta decepción en forma de amargura...
Y así, desde hace ya unos años vengo oyendo voces hiper críticas para con el PSOE (por cierto, todas estas voces aplauden y jalean a Podemos), partido que sigue siendo fundamental en la articulación social de España y el gran partido de las clases trabajadoras y clases medias de nuestro país... Voces críticas de personas y personajes que otrora bien que alababan a dicho grupo político del que recibían muchas ayudas, subvenciones o puestos de responsabilidad... Y qué curioso que por entonces no se oían esas voces críticas, lo cual demuestra y pone a las claras el tipo de persona que se es, toda vez bastante ligera de convicciones morales, eso del mundo de las ideas, o eso de las ideas del mundo que todos tenemos...
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