martes, 7 de febrero de 2012

MIS PINTURAS (1)

Ha muerto Tàpies; quizá después de Picasso el más grande creador de la pintura contemporánea española y del mundo. Ayer, en Facebook. ya exalté su figura. Y como homenaje a la desaparición de un hombre fundamental en la Historia del Arte, inicio unas entregas de las pinturas que me emocionaron en su día y que me siguen sobrecogiendo...

Era julio, creo recordar, de 1996. Y era Florencia... Y era la calor; el hotel, en las afueras de la ciudad, el Sheraton; y rodeado de vegetación, nos permitía cenar, con el frescor de la noche, en la elegante terraza del restaurante; fueron cuatro noches inolvidables, con visita obligada a Venecia... Sobre todo, por la compañía... Ultimamente, cuando lo hago, viajo solo (dicen que el viajero siempre debe hacerlo solo); pero aquel viaje era necesario hacerlo acompañado, por aquello del síndrome de Stendhal y puedes caer en redondo por una bajada de tensión: en Italia, en la Toscana, y con los calores húmedos, enseguida te alcanza aquel síndrome...
Y si toda la Toscana te sobrecoge, en especial Florencia, o Siena, los Médici en derredor, etc., me quedo con lo que contiene los Uffizi, y en especial con esta bellísima y hermosa obra de arte: LA PRIMAVERA DE BOTTICELLI... Y en aquel salón, con el asiento ad hoc para observarlo detenidamente (te impiden siempre la vista los visitantes), ante tanta solemnidad y emoción me dije: ha merecido la pena la cola. Hoy se puede obtener la entrada on line; pero por entonces no había esa comodidad y estuvimos casi dos horas en cola. Pero no podíamos dejar Florencia sin sentir lo que sentí delante de LA PRIMAVERA...

Creo que fue algo parecido al síndrome de Stendhal; sólo recuerdo que empecé a sudar de emoción...

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