lunes, 27 de febrero de 2012

AGOTADO DE CUERPO

Agotado de cuerpo; reconfortado del resto... Pasear por lo que fueron calzadas romanas; ensombrecerme con los que debieron ser los cipreses de entonces; oler sus flores y habitar en sus texturas...
Y con su cielo, su piedra, su cal...
¡Qué hermosa es Mérida!...
Definitivamente, no todo tiene un precio; pero lo sabemos, quizá, demasiado tarde...
Aunque a tiempo de rectificar para muchos...

Cuando eran las 19,30 horas entraba en Sevilla, donde descansaré.
Mañana retornaré a Málaga. Lo haré por Cádiz y su costa: por donde aún soy la vida...


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentarios