lunes, 27 de febrero de 2012

EL CASO URDANGARIN

A raíz del caso Urdangarín se ha abierto el debate sobre la necesidad o no de una República. Sinceramente, creo que es oportunista ligar la opción de República a las presuntas golfadas de determinados miembros de la Casa Real. Y es oportunista porque el debate sobre la República no tiene que tener justificación más allá de su misma realidad; es verdad que es un insulto a la inteligencia el que la Jefatura de un Estado sea hereditaria; pero también es verdad que un Presidente de República podría ser un tercero en discordia sin competencias como el Rey y con las mismas posibilidades de golfadas. Aparte de que ya tampoco quedan estados (sólo basta ver lo que está ocurriendo en Europa).
Otra cosa es que el caso Urdangarín haya puesto fin al silencio sobre los asuntos que sospechábamos de la Casa Real y que hubo un pacto no escrito de no mentar ni hacer público... Y aquí es donde creo que hay un antes y un después: la Casa Real ya no será tapada ni justificada para el resto de lo que haga fuera de lo "decente"; y el origen de todo quizá esté en haber querido jugar a Monarquía con los beneficios de una República, como el optar por bodas plebeyas con riesgos evidentes de perder el boato y la bula...

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