En ese estado cuasi etéreo, contemplo esta prodigiosa mañana en el inicio de este primer día de mi futuro...
Como el futuro no existe, y porque somos el tiempo que nos queda (Caballero Bonald), he decidido que hoy comienzo a vivir de nuevo...
Y empezar a vivir de nuevo, aquí, en esta tierra tan apetente de vida y tan "snob" en su enorme pozo celta y románico, de cierto que es todo un lujo del que soy bastante consciente como para no dejar de gozar esta mi nueva vida que hoy comienza...
De seguro, volveré a ser feliz, como resplandores de lunas...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios