miércoles, 2 de noviembre de 2011

NO, DIRÉ NO...

 “Nunca tuve suerte con las mujeres, soporto con resignación una penosa joroba, todos mis familiares han muerto, soy un pobre solitario que trabaja en una oficina pavorosa. Por lo demás, soy muy feliz. Hoy más que nunca porque empiezo -8 de julio de 1999- este diario que va a ser al mismo tiempo un cuaderno de notas a pie de página que comentarán un texto invisible y que espero que demuestren mi solvencia como rastreador de bartlebys.”
ENRIQUE VILA-MATAS (Bartleby y Compañía. 2000)

Así comienza este delicioso librito de Vila-Matas, uno de mis vivos, que se basó en el libro Bartleby, el escribiente, de Herman Melville,  y que cuenta la historia de un oficinista llamado Bartleby. El narrador asigna a Bartleby un lugar junto a la ventana. Al principio, Bartleby realiza una gran cantidad de trabajo. Sin embargo, cuando el narrador le solicita que examine con él un documento, contesta: "Preferiría no hacerlo". A partir de entonces, a cada requerimiento de su patrón para examinar su trabajo, Bartleby contesta únicamente esta frase, con total serenidad, aunque continúa trabajando como copista con la misma eficiencia que al principio. El narrador descubre que Bartleby no abandona nunca la oficina, y que en realidad se ha quedado a vivir allí. Al día siguiente formula algunas preguntas, a las que Bartleby contesta sólo con su consabida frase. Poco después, Bartleby decide no escribir más, por lo cual es despedido. Pero se niega a irse, y continúa viviendo en la oficina. Sintiéndose incapaz de expulsarlo por la fuerza, el narrador decide trasladar sus oficinas. Bartleby permanece en la antigua oficina, y los nuevos inquilinos se quejan al narrador de la presencia de Bartleby, que se niega a irse del lugar. El narrador intenta convencer a Bartleby, sin conseguirlo. Finalmente, Bartleby es detenido por vagabundo y encerrado en la cárcel. Allí, Bartleby termina dejándose morir de hambre poco después de la última visita que le hace el narrador.
Y, como dice en su primera página, Vila-Matas rastrea buscando Bartleby por el mundo. Y encuentra algunos, como Salinger.

Hoy, cansado de muchas renuncias, agotado de tanta mentira, me siento un Bartleby. Y diré hoy que no a todo; que no haré lo que hace la mayoría; que no iré a donde van los ciegos que no quieren ver y que son los más ciegos; que no perderé más felicidad de mi vida en idioteces y vulgaridades. Y... Que no; que "preferiría no hacerlo"...

Hoy diré que no a todo; menos a ti, que tampoco hoy te nombro...

http://www.youtube.com/watch?v=ioUTBL3dlnw&feature=related

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentarios