jueves, 29 de septiembre de 2016

D.E.P. QUERIDO PACHI...

Mientras somos, la muerte no es; y cuando la muerte es, nosotros no somos.
José Saramago decía que estar vivo es estar y morir es no estar...
Toda muerte, como siempre sostengo, es un fracaso de la vida; si, además, la muerte nos lleva siendo jóvenes aún (58 años), la muerte, además de fracaso de la vida, es una infinita tragedia de derrota...
Toda muerte, al fin, también es un descanso de la vida: vivir nunca fue un cuento sino una dura realidad. Ya descansan los muertos, sí; pero quedamos los vivos, los que aún no descansamos y los que nos quedamos más solos, más tristes y más desamparados sin aquellos que se nos fueron sin regresos, salvo nunca el olvido...
Hoy, en la mañana, una querida compañera me avisó: Pachi, nuestro querido Patricio Gutiérrez del Álamo, compañero de tantos años en la empresa, amigo de tantas confidencias, de tantos desayunos en la cafetería de la empresa cuando regresé a Málaga, donde tenía el despacho de sus últimas tareas, ha fallecido.
¡Cuántas mañanas, por aquellos pasillos, preocupados por el futuro, por el mañana, cuando el mañana se le iba sin saberlo aún!!! Y hablábamos de Galicia, a la que también amaba y tantas veces pateó...
Lo llamé (yo ya había salido de la empresa) cuando supe que estaba malito; le dije que tenía que ser fuerte, que de aquello que tenía se salía, que cerca de mí había muchas razones para ser optimista; pero también le dije que tenía que poner mucho de su parte. Y me dijo que sí, que estaba bien de ánimos, y que era fuerte...
Y yo le creí... Pero la suerte no ha creído en él y se lo ha llevado para que al fin descanse y no me llame más preocupado por el futuro...
Sólo tenía 58 años.
Descansa en paz, querido Pachi...
P.S.¡Vaya mes de setiembre que llevo en las espaldas!!!

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