domingo, 4 de septiembre de 2016

D.E.P. EL AMIGO DE CASI TODA UNA VIDA

Sábado 3 de septiembre (11,15 horas)

Me acabo de enterar; me ha llamado un querido amigo para darme la noticia.
Miguel era alguien muy especial en mi vida. Una vida que pronto nos apartó por mor de los trabajos y las ausencias...
Con los años, y gracias a amigos comunes y a las nuevas tecnologías lo recuperé...
Andaba por las Canarias, en aquella Isla Bonita que tanto amaba...
Hace un par de años decidió regresar a la península: venía a curarse... Sabía que aquí estábamos los suyos, su familia y sus amigos...
Estaba malito, muy malito... Y yo sólo intentaba, casi a diario, animarlo; para animarme a mí: siempre tan egoístas los seres humanos!!!
A mi vuelta de Galicia este verano habíamos quedado para vernos. Cuando pasaran los calores...
Pero los calores no han pasado y él se me ha ido sin poder despedirme de él...
Era muy joven aún; era un hombre decente que amaba la vida...
Y era alguien muy especial para mí: es muy duro todo esto...
Es terrible...
Descansa, querido Miguel...

Domingo 4 de septiembre

Sostengo que los cementerios están llenos de gente imprescindible. Una constatación ante la vanidad de aquellos que así se lo creyeron: Y es que aquellos fanfarrones que se creen el centro del mundo no saben aún que pronto serán la nada y el olvido.
Miguel no era de los imprescindibles; al contrario, siempre fue consciente de que no era nadie ni a nadie tenía por qué ningunear con la soberbia; pero nunca supo (aunque a veces se le notaba que se lo imaginaba) que para un puñado de seres humanos sí fue, era, es, una persona imprescindible...
Y ese puñado de gente acabamos de despedirlo como se merecía y quiso: sin acto religioso alguno, en silencio, emocionados y recordando que ha sido y será siempre uno de los hombres que formaron parte de lo mejor de nuestras vidas...
Todos sabíamos que ese adiós llegaría; pero al igual que tras la noche llega la mañana luminosa, siempre queríamos pensar que sanaría y renacería de nuevo al mundo; un mundo que sin él se nos hace más difícil, y, sobre todo, menos decente: Miguel era un hombre libre, honesto, decente, que amaba la vida y a sus gentes, los suyos, los que aquí quedamos contrariados una vez más por la derrota y la pena...
Hoy hemos despedido a un hombre imprescindible en mi vida... Y siento una profunda tristeza y una infinita emoción...
P.S. Fotos: Son fotos recientes de -y con- Miguel. Un día del pasado año estuvimos en su querida Nerja. Le llevé uno de mis dibujos. Al pasar por una tienda de 'guiris' me detuve viendo unos dibujos en acuarela de una chica extranjera que los vendía; sin que me diera cuenta, compró uno (el de la foto)... Cuando lo dejé en su roulotte, en el camping, me entregó el que había comprado: era para mí. Sí, por entonces vivía en un camping -amaba la naturaleza y la vida sin patrias- mientras buscaba casa; y la encontró: una casa en lo alto de un monte donde divisaba el mar, el mar de siempre, de su costa; una casa que antes de alquilarla quiso que yo la viera y le diera el visto bueno...






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