Estas políticas son por las que luchábamos cuando entonces; cuando este país vivía en dictadura y cuando era casi analfabeto. Esto se llama democracia y se llaman políticas de solidaridad y de progreso. Y estas políticas sólo se pueden garantizar con consenso social, con contrato social, con políticas fiscales progresivas, transparentes y solidarias. Son las políticas que persigue una democracia avanzada socialmente; son políticas socialdemócratas, la única ideología, la única alternativa real, posible, en el mundo de ayer y de hoy en las sociedades capacitadas para repartir el excedente de producción: es el beneficio social redistribuido que permitirá la utopía de la igualdad de oportunidades para que cada ciudadano elija su forma de vida, su posición en el mundo y la dicha de vivir...
Y dejémonos de monsergas, de banderitas, de discursos y de salvapatrias con discursos déjà vu y falsos en su origen y en su final.
Sin consenso social, sin apoyo mayoritario de la sociedad, estas políticas de progreso su hunden en el camino... Y esta es la obligación de la izquierda política y social: profundizar en estas políticas redistributivas con el mayor consenso posible que las haga irreversibles. Y eso es la democracia: una cosa muy aburrida, que funciona, que va, y que nos hace ocuparnos de vivir y trabajar sin sobresaltos a sabiendas de que nuestros representantes hacen sus deberes y todo funciona; si se equivocan, a la calle; si meten la mano, a la cárcel. Y poco más; más allá de disfrutar de esto de vivir en paz, que ya es!!!...
Para esto precisamente luchábamos entonces...
Y dejémonos de monsergas, de banderitas, de discursos y de salvapatrias con discursos déjà vu y falsos en su origen y en su final.
Sin consenso social, sin apoyo mayoritario de la sociedad, estas políticas de progreso su hunden en el camino... Y esta es la obligación de la izquierda política y social: profundizar en estas políticas redistributivas con el mayor consenso posible que las haga irreversibles. Y eso es la democracia: una cosa muy aburrida, que funciona, que va, y que nos hace ocuparnos de vivir y trabajar sin sobresaltos a sabiendas de que nuestros representantes hacen sus deberes y todo funciona; si se equivocan, a la calle; si meten la mano, a la cárcel. Y poco más; más allá de disfrutar de esto de vivir en paz, que ya es!!!...
Para esto precisamente luchábamos entonces...
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