¿CRISIS DEL PROYECTO SOCIALDEMÓCRATA?

En los últimos tiempos se habla de la crisis de la socialdemocracia en el mundo occidental como si necesitase de proyecto; como si no tuviese proyecto alguno. Pero niego la mayor…

El problema de la socialdemocracia no es de proyecto, ni de discursos, ni de programas. El proyecto ya existe: conseguir la plena igualdad de oportunidades. Esa es la verdadera utopía del socialismo. Pero es la falta de liderazgo, de capacidad de convencimiento de que aquella utopía es posible, la que hace que en tiempos de crisis la socialdemocracia pierda fuelle, pues repartir miserias no ayuda a conseguir la utopía de aquella igualdad, entendiendo por liderazgo aquello que hace creíble el proyecto y tiene la capacidad de convencer a una amplia mayoría social para intentar llevarlo a cabo convenciendo al otro resto de la sociedad (pactando, teniendo en cuenta su correlación de fuerzas en cada momento) de la bondad de su proyecto; un proyecto que será la realidad y sus condicionantes, es decir, la capacidad de los recursos económicos y financieros suficientes, así como que la sociedad esté dispuesta a poner al servicio de aquel proyecto los recursos suficientes. Y, como no, la capacidad de persuasión del liderazgo para que aquel proyecto de la igualdad de oportunidades se alcance con mayor o menor grado y con mayor o menor garantías de estabilidad a futuro…

Eso es hacer política socialdemócrata; lo demás, discursos, palabras y mentiras…

Por tanto, el proyecto existe; lo que faltan son liderazgos preclaros para ilusionar a la mayoría de la sociedad de que el proyecto, la utopía de la igualdad de oportunidades, es posible y necesaria.
Y lo terrible es que aquella falta de liderazgo, en el caso español, algunos la quieren suplir con un señor que ha demostrado su incompetencia hasta el hartazgo…

Triste y lamentable…