UN GRAVE ERROR QUE URGE CORREGIR YA

Más allá de estrategias diferenciadas entre la abstención y el NO es NO, creo que el error del PSOE ha sido colectivo desde la dimisión de Rubalcaba y la convocatoria de Primarias para elegir al Secretario General del PSOE.

Las primarias deben ser sólo para elegir candidatos a las elecciones y en todos los ámbitos territoriales donde tengan lugar aquellas elecciones. Y en esas primarias deben participar los simpatizantes y/o votantes que así lo quieran con avales de al menos dos militantes y el pago de una cantidad (3-6 euros) para ayudar a financiar la campaña de su candidato.

El Secretario General del PSOE y de su equipo (la Ejecutiva) serían elegidos en Congreso, y no por el procedimiento de primarias.

Y todo ello porque el Secretario General no sólo representa a los militantes sino, también, a las federaciones territoriales.
Y ese ha sido el error, no de Sánchez, sino de todo el PSOE por haber elegido al Secretario General en un proceso de primarias y después se convocó el Congreso, cuando el proceso debió ser justo al revés: primero el Congreso donde se elige a la dirección del partido y luego un proceso de primarias para elegir al candidato a la Moncloa...

Y tras el error más errores: como hay un antecedente, yo, fracasado por haberme enfrentado a las federaciones, o las federaciones cuestionarme, me escudo en la militancia para enfrentarme a las federaciones. Consecuencia: el bochornoso espectáculo del pasado sábado...
La pena, que los vencidos se escudan ahora, con virulencia, en reivindicar un nuevo proceso de primarias para que renazca el líder muerto.

Sí, fue un error convocar primarias para la elección de Secretario General, toda vez el Secretario General tiene que coordinar, también, y con consensos amplios, a todas las federaciones del partido; un partido que es también Federal como de facto es el estado autonómico español...

Un error de todos y que todos han pagado; y el precio ha sido tan alto que lo hemos pagado también todos los demás ciudadanos, porque el PSOE es un partido necesario y fundamental para la cohesión social y territorial de España: sin un PSOE fuerte, España es más injusta socialmente y más insolidaria territorialmente.