Dice EL PAÍS en su edición digital: "El tipo que pagan las empresas sobre su resultado contable (11,6%) es inferior al que soportan las familias por su renta (12,4%).
El porcentaje real sobre el resultado contable que pagan las sociedades mercantiles en España está por debajo de la media europea (26%) e incluso es inferior al controvertido tipo nominal del impuesto sobre sociedades en Irlanda, en el 12,5%"...
Y digo yo: un país que consiente esto es un país indecente, amoral e injustamente inhumano... ¿Por qué se consiente tanta desgravación y tantas deducciones?
Y añado: el que con su silencio apoye esta realidad es también un indecente, un amoral y un ejemplo del concepto de súbdito aborregado frente al de ciudadanía crítica y responsable. Y el que, además, aplaude esta situación no sólo es un indecente amoral, sino que además no debería formar parte de la nacionalidad española y debería ser menospreciado públicamente...
¿Con qué rigor nos dirán una vez más que la crisis será soportada por todos equitativamente... Por cierto, añadan a este drama de la escasa imposición sobre beneficios la ingeniería financiera para no obtener beneficios contables sobre los que declarar el impuesto de sociedades, que lo es sobre los beneficios y de tan sólo del 11,6% de media tras las desgravaciones... Y añadan el enorme fraude fiscal a través de Paraísos Fiscales que consienten los gobiernos del mundo...
Hace falta ya una reforma fiscal que acabe con las desgravaciones y las deducciones, y un compromiso de lucha contra el amoral fraude fiscal...
El porcentaje real sobre el resultado contable que pagan las sociedades mercantiles en España está por debajo de la media europea (26%) e incluso es inferior al controvertido tipo nominal del impuesto sobre sociedades en Irlanda, en el 12,5%"...
Y digo yo: un país que consiente esto es un país indecente, amoral e injustamente inhumano... ¿Por qué se consiente tanta desgravación y tantas deducciones?
Y añado: el que con su silencio apoye esta realidad es también un indecente, un amoral y un ejemplo del concepto de súbdito aborregado frente al de ciudadanía crítica y responsable. Y el que, además, aplaude esta situación no sólo es un indecente amoral, sino que además no debería formar parte de la nacionalidad española y debería ser menospreciado públicamente...
¿Con qué rigor nos dirán una vez más que la crisis será soportada por todos equitativamente... Por cierto, añadan a este drama de la escasa imposición sobre beneficios la ingeniería financiera para no obtener beneficios contables sobre los que declarar el impuesto de sociedades, que lo es sobre los beneficios y de tan sólo del 11,6% de media tras las desgravaciones... Y añadan el enorme fraude fiscal a través de Paraísos Fiscales que consienten los gobiernos del mundo...
Hace falta ya una reforma fiscal que acabe con las desgravaciones y las deducciones, y un compromiso de lucha contra el amoral fraude fiscal...
www.olhardireito.blogspot.com
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