Lejos de Lisboa, lejos de algunos, con saudades de la ciudad blanca, la ciudad de Pessoa, salgo a la FNAC de Marbella, y, con posterioridad, subiré por los montes de Ojén y Monda para alcanzar Coín, donde pasaré el día en el campo, tras comprar pan de La Curruca y avíos de grasa de toda la vida de mi pueblo...
¡Que ustedes lo pasen bien, lejos de Lisboa, lejos de mí...!, jajaja...
¡Que ustedes lo pasen bien, lejos de Lisboa, lejos de mí...!, jajaja...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios