Al parecer todo es un terrible regreso hacia ámbitos que nunca pensábamos que llegaríamos a alcanzar...
No sólo ya no somos seres humanos sino componentes del factor trabajo, o costes laborales, o clases activas o pasivas; tampoco ya somos ciudadanos: sólo somos "clientes", o consumidores de servicios con contratos de adhesión cuasi monopolísticos, y sin poderes públicos que protejan nuestros derechos para con aquellos abusos...
Nunca fue el lenguaje inocente; y menos cuando los avaros nos han arruinado y necesitan como vampiros más sangre nuestra después de muertos, ese estado al que muchos ya han llegado en vida...
Habrá que volver al Sur...
No sólo ya no somos seres humanos sino componentes del factor trabajo, o costes laborales, o clases activas o pasivas; tampoco ya somos ciudadanos: sólo somos "clientes", o consumidores de servicios con contratos de adhesión cuasi monopolísticos, y sin poderes públicos que protejan nuestros derechos para con aquellos abusos...
Nunca fue el lenguaje inocente; y menos cuando los avaros nos han arruinado y necesitan como vampiros más sangre nuestra después de muertos, ese estado al que muchos ya han llegado en vida...
Habrá que volver al Sur...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios