Estamos en una sociedad que parece regresar a la ñoñería, la doble moral, la ridiculez y las poses falsarias y de otros tiempos oscuros...
Las épocas de crisis las son en su totalidad, no sólo económicas sino también en los asuntos de la moral y las relaciones humanas de todo tipo...
Y así, mujeres a las que una cierta galantería sincera les gusta para con ellas, se ponen el chip feminista para cuando aquella galantería lo es para con otra mujer...
Que me diga una sola mujer que no le gusta que le diga un amigo que qué guapa es. O qué guapa estás hoy... Del mismo modo a un hombre: se me diga a qué hombre no le gusta que una mujer o un hombre le diga que es guapo o que está muy guapo...
En suma: la doble moral nunca la he comprendido por falsa. Pero lo lamentable es que cuando ya creí que este país nuestro llamado España había superado la cicatería y la ñoñeria, en apenas unos años hemos regresado y al que ose decirle a una mujer que es guapa será tachado de machista o de acoso.
Y por ultimo: ¿acaso cuando una mujer le diga a un hombre que es guapo -o, qué guapo estás- será considerado por el hombre acoso de aquella mujer hacia él?
En fin: una pena de tanto regreso a las tinieblas de una mentira que se hace colectiva sin darnos cuenta de aquel regreso y oscuridad, donde sólo habita la siniestra muerte de la belleza por mor de aquella mentira...
Las épocas de crisis las son en su totalidad, no sólo económicas sino también en los asuntos de la moral y las relaciones humanas de todo tipo...
Y así, mujeres a las que una cierta galantería sincera les gusta para con ellas, se ponen el chip feminista para cuando aquella galantería lo es para con otra mujer...
Que me diga una sola mujer que no le gusta que le diga un amigo que qué guapa es. O qué guapa estás hoy... Del mismo modo a un hombre: se me diga a qué hombre no le gusta que una mujer o un hombre le diga que es guapo o que está muy guapo...
En suma: la doble moral nunca la he comprendido por falsa. Pero lo lamentable es que cuando ya creí que este país nuestro llamado España había superado la cicatería y la ñoñeria, en apenas unos años hemos regresado y al que ose decirle a una mujer que es guapa será tachado de machista o de acoso.
Y por ultimo: ¿acaso cuando una mujer le diga a un hombre que es guapo -o, qué guapo estás- será considerado por el hombre acoso de aquella mujer hacia él?
En fin: una pena de tanto regreso a las tinieblas de una mentira que se hace colectiva sin darnos cuenta de aquel regreso y oscuridad, donde sólo habita la siniestra muerte de la belleza por mor de aquella mentira...
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