Siempre sucede lo mismo: en cuanto se equivocan o no han sido eficientes, aparecen voces criticando a los políticos, como si fuesen extraterrestres. .. Y siempre salgo en defensa de ellos, más allá de analizar sus errores y/o sus decisiones...
La política a todos nos atañe. Si son mediocres nuestros elegidos, al menos les reconozco que hayan dado el paso. Otros que se consideran más listos no dan ese paso. La política es necesaria y a todos nos atañe. De lo contrario, esto sería la selva. Y alguien debe estar en esa faena. Repito, si son mediocres los políticos, también es culpa nuestra por no dar aquel paso que dan los mediocres al presentarse como nuestros representantes...
Por tanto, mi solidaridad y mi reconocimiento. Yo los critico y mucho, pero sin acritud. Y reconociendo por encima de todo su valentía.
Repito, sin POLÍTICA esto seria la selva, la guerra y la miseria... Necesitamos leyes, ordenamiento jurídico y estructuras de convivencia que nos cohesione como ciudadanos portadores de derechos, sí, pero sobre todo portadores de deberes. Sin deberes, como decía Saramago, no hay derechos. Y uno de los deberes como ciudadanos debería ser nuestra disponibilidad para ser representantes de los demás conciudadanos.
En suma, tenemos los políticos que nos merecemos, bien por activa (si votamos a incompetentes) o por pasiva (si no participamos).
La política a todos nos atañe. Si son mediocres nuestros elegidos, al menos les reconozco que hayan dado el paso. Otros que se consideran más listos no dan ese paso. La política es necesaria y a todos nos atañe. De lo contrario, esto sería la selva. Y alguien debe estar en esa faena. Repito, si son mediocres los políticos, también es culpa nuestra por no dar aquel paso que dan los mediocres al presentarse como nuestros representantes...
Por tanto, mi solidaridad y mi reconocimiento. Yo los critico y mucho, pero sin acritud. Y reconociendo por encima de todo su valentía.
Repito, sin POLÍTICA esto seria la selva, la guerra y la miseria... Necesitamos leyes, ordenamiento jurídico y estructuras de convivencia que nos cohesione como ciudadanos portadores de derechos, sí, pero sobre todo portadores de deberes. Sin deberes, como decía Saramago, no hay derechos. Y uno de los deberes como ciudadanos debería ser nuestra disponibilidad para ser representantes de los demás conciudadanos.
En suma, tenemos los políticos que nos merecemos, bien por activa (si votamos a incompetentes) o por pasiva (si no participamos).
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