NUNCA FUI NI SERÉ NACIONALISTA

Nacer aquí o allí sólo es un hecho fortuito, y como tal lo tengo. 

Yo amo la tierra en que nací porque es donde vi por primera vez el mundo y donde amé y fui amado por mi gente.

Más tarde vi otros mundos, otros lugares; y me gustaron tanto o más que el mundo donde nací.

Por eso amo también otros mundos, más allá del mundo donde nací.

Porque allí, en aquellos otros mundos, en sus también hermosas tierras, habitan o habitaron seres humanos que amé y amo, y juntos llegamos a sentir que la vida es más hermosa mientras más amplias son nuestras miradas.

P.D. Aunque, de verdad de verdad, el territorio que más me gustó siempre era aquel que rodeaba tu boca...