martes, 10 de octubre de 2017

¡BASTA YA!

Reconozco que he sido de los prudentes a la hora de pedir firmeza de los poderes públicos ante la deriva golpista del nacionalismo catalán; entre otras cosas porque nunca pensé que llegarían tan lejos y porque siempre confié en que el Gobierno de España, como nos repetía una y otra vez, no permitiría traspasar determinadas líneas rojas...
La última fue que no habría urnas y no habría referéndum; no lo hubo, es verdad; no lo hubo legal, pero hubo urnas y hubo gente que votó hasta más de cuatro veces...
En cualquier caso, no cumplió con su deber...
Y ya me he cansado... Mañana pasará lo que pase, pero será tarde: unos desalmados en nombre de una bandera han roto la convivencia entre catalanes y entre españoles. Y eso es un delito que deben pagar todos; unos por acción y otros por omisión...
Repito, he sido hasta la fecha, de los prudentes, de los confiados en mi Gobierno. Pero ya no puedo más...
¿Cómo es posible, con todo lo que ya sabemos de su figura, que el señor Trapero siga en su puesto y no esté detenido?
¿Cómo es posible que unos dirigentes de una Asociación de no se qué, privada, convoque a los catalanes para rodear el Parlament y no sean detenidos inmediatamente?
¿Cómo es posible que el Señor Puigdemont siga siendo el President de Cataluña después de tantos delitos, entre ellos, no acatar órdenes judiciales y/o el de dirigirse al Jefe del Estado en la forma irrespetuosa que lo hizo el otro día??
¿Cómo es posible que la Señora Forcadell siga en su puesto de Presidenta del Parlament después de lo sucedido los pasados días 6 y 7 se septiembre en el Parlament?
¿Cómo es posible que se solicite prudencia y diálogo desde partidos que han gobernado España y saben de desafíos y de peligros con el ceder al chantaje de golpistas?
¿Cómo es posible que se solicite dialogar con quienes han cometido delitos tan graves como el desacato de órdenes judiciales con desafíos claros al Estado democrático y de Derecho?
No tengo las respuestas de por qué es y ha sido posible... O quizás sí: el que habita la Moncloa es un incompetente y no da la talla.
En cualquier caso, esto no es de recibo.
¡Basta ya!!!
¡Esto no es un Estado de Derecho, esto es un circo mediático-político predemocrático inadmisible!!!

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