Es el sol del SUR, ese poderoso astro, tan coqueto, que gusta de ocultarse entre grises nubes; para blanquearlas y para volver a salir tras romper los cielos. Y es tan coqueto como vanidoso; porque sabe de su necesidad. Y nos es tan nuestro como la hermosura de su poder, desparramada sobre los campos y los mares del Sur, por donde amanezco a diario a la vida, como en este domingo, ya cercano a la Navidad...
CUANDO los días... [Lo que me queda de mis días: diario de un escéptico]
domingo, 19 de diciembre de 2010
EL SOL
Tras un día de aguas tormentosamente imposibles, amanezco en sol; un sol que ilumina, al fin, tan terrible desasosiego; al tranquilizar lo oscuro; al hacerlo llevaderamente lustroso...
Es el sol del SUR, ese poderoso astro, tan coqueto, que gusta de ocultarse entre grises nubes; para blanquearlas y para volver a salir tras romper los cielos. Y es tan coqueto como vanidoso; porque sabe de su necesidad. Y nos es tan nuestro como la hermosura de su poder, desparramada sobre los campos y los mares del Sur, por donde amanezco a diario a la vida, como en este domingo, ya cercano a la Navidad...
Es el sol del SUR, ese poderoso astro, tan coqueto, que gusta de ocultarse entre grises nubes; para blanquearlas y para volver a salir tras romper los cielos. Y es tan coqueto como vanidoso; porque sabe de su necesidad. Y nos es tan nuestro como la hermosura de su poder, desparramada sobre los campos y los mares del Sur, por donde amanezco a diario a la vida, como en este domingo, ya cercano a la Navidad...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios