El desconcierto de la vieja Europa y su declive político en el escenario del poder mundial, no sólo es una clara consecuencia de la crisis financiera que venimos padeciendo desde hace ya casi una década, sino, y sobre todo, tiene mucho que ver con la falta de liderazgos políticos y sociales creíbles y honestamente atractivos en toda la vieja Europa...
¿Dónde están los necesarios W. Churchill, H. Kohl, F. Mitterrand, Felipe González, Olof Palme, Willy Brandt, etc?
En el resto del mundo, peor: Trump, Putin, etc... Lamentable...
¡Qué tragedia!!!!
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