Como en toda estructura de poder y como en todas las instituciones de la vida, sean del ámbito que sean, también en la Europa del euro existe lo que se llama una correlación de fuerzas, unas relaciones de poderes y de contrapoderes... Y cada país miembro ejerce aquel poder o contrapoder conforme su propio poder interno lo pueda ejercer y/o contra-ejercer. Los países más sólidos y de más poder no son sólo los que tienen más capacidad productiva y ejercen el papel de locomotoras de la economía regional, sino también los que tienen detrás una ciudadanía que les exige prestancia y rigor a sus líderes, más allá de la capacidad o no de liderazgo de los representantes políticos...
Aún recuerdo lo indecente de Rajoy vociferando a diario que el problema de España era ZP, en vez de haber ejercido la honestidad moral de apoyar al gobierno de España de entonces ante tan grave situación. Y claro, ha sido llegar al poder por la puerta de la mentira y no sólo ha cruzado rayas que no debía cruzar, sino que encima le echa la culpa a Europa (que es verdad, la tiene, pero debió decirlo también entonces, no ahora) y además solicita el apoyo del PSOE, que evidentemente se lo está dando aunque a regañadientes, cosa que lo engrandece y le da coherencia, aunque debería exigírsele al PSOE el que solicite del gobierno y del PP un gran pacto de estado sobre cuatro grandes materias: sanidad, educación, modelo territorial, y Europa y la política exterior.
Sólo así y con exigencias de rigor, podríamos recuperar parte del poder interno dentro de la UE que hemos perdido por la falta de liderazgo y deficiencias evidentes de Rajoy, como, también, por la falta de unidad de España ante la UE, realidad de la que se benefician Alemania y los poderosos intereses que sustentan las instituciones liberales y pre-democráticas de la UE
Sólo un pacto de estado que exija de la UE el que el Banco Central Europeo actúe ya y con urgencia evitará que este nuestro país caiga en un empobrecimiento tan hondo que ni siquiera en una década pueda ver la luz, que no es sino absorber el enorme paro creado por tanta estafa y tanta falta de rigor de nuestros representantes políticos nacionales y europeos, más allá de haber enterrado las conquistas sociales de años de diálogo y cohesión social.
Aún recuerdo lo indecente de Rajoy vociferando a diario que el problema de España era ZP, en vez de haber ejercido la honestidad moral de apoyar al gobierno de España de entonces ante tan grave situación. Y claro, ha sido llegar al poder por la puerta de la mentira y no sólo ha cruzado rayas que no debía cruzar, sino que encima le echa la culpa a Europa (que es verdad, la tiene, pero debió decirlo también entonces, no ahora) y además solicita el apoyo del PSOE, que evidentemente se lo está dando aunque a regañadientes, cosa que lo engrandece y le da coherencia, aunque debería exigírsele al PSOE el que solicite del gobierno y del PP un gran pacto de estado sobre cuatro grandes materias: sanidad, educación, modelo territorial, y Europa y la política exterior.
Sólo así y con exigencias de rigor, podríamos recuperar parte del poder interno dentro de la UE que hemos perdido por la falta de liderazgo y deficiencias evidentes de Rajoy, como, también, por la falta de unidad de España ante la UE, realidad de la que se benefician Alemania y los poderosos intereses que sustentan las instituciones liberales y pre-democráticas de la UE
Sólo un pacto de estado que exija de la UE el que el Banco Central Europeo actúe ya y con urgencia evitará que este nuestro país caiga en un empobrecimiento tan hondo que ni siquiera en una década pueda ver la luz, que no es sino absorber el enorme paro creado por tanta estafa y tanta falta de rigor de nuestros representantes políticos nacionales y europeos, más allá de haber enterrado las conquistas sociales de años de diálogo y cohesión social.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios