Cuando yo te conocí, tu sonrisa era muy hermosa;
después vinieron las renuncias y no volví a verla.
Supongo, me paso los días suponiendo, que sigue siendo hermosa;
pero, para mi tristeza, ya no puedo volver a verla...
Quizás tenga que navegar, a través del Mediterráneo, para regresarte...
después vinieron las renuncias y no volví a verla.
Supongo, me paso los días suponiendo, que sigue siendo hermosa;
pero, para mi tristeza, ya no puedo volver a verla...
Quizás tenga que navegar, a través del Mediterráneo, para regresarte...
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentarios