lunes, 28 de mayo de 2007

28 DE MAYO DE 2007

Madrugada…

El resultado electoral tiene muchas lecturas; tantas como ciudadanos. La mía es la siguiente:
1. Ha ganado el PP en nº de votos (ciento y pico mil votos más), pero con una muy baja participación.
2. Aún así, el PSOE gana en nº de concejales, y a través de pactos podrá gobernar en más ciudades y más comunidades autónomas que antes. Y así, se habla de empate técnico.
3. Por tanto, ha fracasado la estrategia de Rajoy en su apuesta de considerar estas elecciones unas primarias. Porque si es verdad que el PP ha ganado en votos (por pocos), la baja participación suele serla de votantes de la izquierda; quiere decirse que de haber participado o ilusionado a esa izquierda abstencionista, el PSOE hubiese ganado estas elecciones. Y la baja participación de la izquierda tiene varias causas:
a) El desgaste de todo poder, con una legislatura llena de tensiones, de crispación y con un presidente al que le ha fallado su estrategia antiterrorista y su estrategia de reformas de estatutos.
b) El desapego hacia la política que conlleva todo escenario de crispación, desapego que se agudiza más en los espacios sociológicos de la izquierda: ahora se explica el por qué el PP optó por esta estrategia; le ha dado resultados, al menos por ahora.
c) La escasa calidad de muchos de los candidatos de la izquierda: Bustinduy, Sebastián, Simancas, etc, son ejemplos claros de lo que digo.
Por último, la izquierda tiene mucho crecimiento en reserva si los políticos son capaces de movilizarla; para ello hace falta mucha renovación y mucha apuesta por profundizar la democracia participativa: partidos, listas, primarias, etc...

10,49 horas…

Los candidatos mal parados, Simancas y Sebastián, no son de recibo. Es una broma de mal gusto. Y para movilizar a la izquierda social (que se abstiene harta de estar harta, y ya se cansó) hay que ilusionarla con candidatos serios, con propuestas nacidas del debate, con listas representativas y democráticamente conformadas, con primarias (aún recuerdo cómo cada vez que han habido primarias en el PSOE se ha ilusionado la izquierda: cuando ganó BorrelL, cuando ganó ZP).
Y para volver a ilusionar a la izquierda abstencionista (la derecha siempre se moviliza), espero dimisiones: espero que Simancas dimita como secretario general de Madrid, como hizo Almunia. Espero que Sebastián se vaya de la política: el ventilador de la mierda le ha salpicado. Y espero que Marisa Bustinduy dimita de una vez, como hizo Almunia.
Y que vuelva la ilusión a la izquierda, con profundización de la democracia y con candidatos atractivos y solventes. Es la segunda vez que Bustinduy pierde. Y Simancas también es la segunda vez. Gana la derecha porque la izquierda se abstiene. Y si se suma IU a los votos del PSOE se gana en muchos sitios. Pero el voto PSOE está desmovilizado. Por ejemplo, a pesar de ganar el PSOE la Diputación de Málaga, el PP ha ganado en la provincia. Y es que el voto PSOE lleva años, décadas, siendo mayoritario en las zonas rurales. Y pierde, por mucho, en las ciudades medianas y grandes. Es una constatación histórica. Significa que se ha quedado antiguo, no se ha modernizado, en su electorado me refiero; y eso hay que solucionarlo. Desde luego no se soluciona con candidatos malos (¿por qué en elecciones autonómicas o generales gana el PSOE en Sevilla, y ayer, en las municipales gana el PP? Por los candidatos. No hay otra explicación. Esa es la realidad: en las municipales hay más componente personal que político.
Insisto, datos preocupantes si no se remedian; y en política hay que dimitir, como hizo Almunia.
En Málaga provincia ha ganado el PP. Y en Sevilla capital. Y lo de Madrid no tiene nombre (por cierto, Gallardón obtuvo más votos en Madrid capital que Aquirre: batalla al canto).
Y por último, la derecha social quiere licencias, dinamismo económico, etc, y parte de que todos los alcaldes son corruptos. Por eso vota a alcaldes de derechas, aún con procesos judiciales en curso, porque saben que con ellos van a seguir obteniendo licencias; y claro, la competencia más clara y potente que tienen los ayuntamientos es el urbanismo, actividad que genera mucho crecimiento y desarrollo, tanto económico como social. Por tanto, la gente de derechas, que, como todos, vota para defender sus intereses, pues vota a los alcaldes de derechas. De ahí que haya ganado el PP en Marbella, y en tantos lugares donde hubo o hay indicios de corrupción pero que hay también muchas oportunidades de negocio.
Así que manos a la obra y a corregir errores. ¡Y dimisiones ya!
Por cierto, ¿por qué cuesta tanto dimitir?. En política es la única forma de asumir los errores; no hay otra. De lo contrario se da la imagen de que los políticos siempre se quedan y que están ahí por lo que están, para vivir de eso… Es el discurso de siempre, que desmoviliza, que rechaza la participación. No hay que enrocarse, que es lo que vienen haciendo. Hay que dimitir. Lo hizo Almunia, y no pasa nada. Al contrario, la gente te reconoce valor en ello. Es la forma que tiene la democracia de asumir los errores, yéndose uno a casa. ¡Ya está bien de enrocarse! Bustinduy tiene que dimitir: ha vuelto a perder (¿dónde está el efecto ZP de que hablaba?); y en la provincia de Málaga ha ganado el PP en nº de votos. Es una vergüenza. Y tiene que dimitir. Y no pasa nada. Al contrario: ilusionará a la gente que se abstiene cansada de esta gente.
Y cansado de estar cansado, ya me cansé.

16,20 horas…

Resulta sorpresivo que a estas alturas de la película, a estas alturas de la historia, muchos españoles vean aún en los políticos espíritu de servicio. Ciertamente me sorprende. Porque, lo que han demostrado a lo largo del ejercicio del poder -o a lo largo de no obtenerlo una y otra vez-, es que están en política para satisfacer su ego personal; y como reconocer esto puede parecer duro a cierto electorado, lo disfrazan de servicio público.
Y así es corriente oír una y otra vez que ellos están ahí por amor al prójimo, o por servicio al ciudadano; porque ellos es que son muy solidarios, muy desprendidos, y muy llamados a salvarnos…
Si fuese así, ¿por qué no se van cuando pierden?
Y es que están en política porque les apasiona el poder.
Lo cual es legítimo, intentar el poder democráticamente. Pero que no nos den lástima: les apasiona la política y viven para ella o de ella.

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