Muchos presentimos lo que pasaría tras conocer de las intenciones del Gobierno de España de cambiar el marco legal de la RTVE en lo que afectaba a la elección de su Presidente. Y muchos sentimos una pro
funda decepción: sólo era el comienzo de una siniestra "caza de brujas", la que siempre practican cuando llegan al poder, eso que se creen ellos que les pertenece por naturaleza, nunca por delegación de la ciudadanía, ni, desde luego, puede ser ostentado por "rojos indocumentados", a los que habrá que echar del poder con los métodos y los instrumentos que sean necesarios en cada coyuntura.
También muchos fuimos conscientes de la ausencia de independencia en los medios privados y en sus profesionales, y muchos lo hemos denunciado; no había tertulia o debate entre periodistas, en los que unos y otros argumentaran a favor o en contra del grupo político al que sin rubor representaban, siendo muy previsible todo lo que decían y argumentaban; y estos voceros del poder -de uno y otro bando-, también han contribuido a que el poder manipule siempre la información; si no existieran estos voceros vendidos a sus amos los grupos políticos, no existirían las "caza de brujas", ni los vetos, y tampoco existiría el triste espectáculo al que nos tienen acostumbrados muchos tertulianos, que llaman líderes de opinión y que no son más que correveidile de aquellos que los tienen a sus órdenes; eso sí, divinamente pagados para esa innoble e indecente labor.
Por tanto, es verdad que es una obscenidad lo que están haciendo con RTVE tras el éxito del modelo vigente hasta hace unos meses; pero de no existir connivencia profesional en el sector no habría lugar para estos atropellos al derecho a la información de la ciudadanía y a la caza de brujas de los mejores que no se casan con ellos...
También muchos fuimos conscientes de la ausencia de independencia en los medios privados y en sus profesionales, y muchos lo hemos denunciado; no había tertulia o debate entre periodistas, en los que unos y otros argumentaran a favor o en contra del grupo político al que sin rubor representaban, siendo muy previsible todo lo que decían y argumentaban; y estos voceros del poder -de uno y otro bando-, también han contribuido a que el poder manipule siempre la información; si no existieran estos voceros vendidos a sus amos los grupos políticos, no existirían las "caza de brujas", ni los vetos, y tampoco existiría el triste espectáculo al que nos tienen acostumbrados muchos tertulianos, que llaman líderes de opinión y que no son más que correveidile de aquellos que los tienen a sus órdenes; eso sí, divinamente pagados para esa innoble e indecente labor.
Por tanto, es verdad que es una obscenidad lo que están haciendo con RTVE tras el éxito del modelo vigente hasta hace unos meses; pero de no existir connivencia profesional en el sector no habría lugar para estos atropellos al derecho a la información de la ciudadanía y a la caza de brujas de los mejores que no se casan con ellos...
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