domingo, 24 de mayo de 2015

24 DE MAYO

Hoy cumple 94 años. Nació en Tolox (Málaga) en 1921 y fue educada para ser libre: su padre tenía en el despacho de la farmacia una foto de Ramón y Cajal y era cercano a las ideas de Julián Besteiro, siendo un hombre conservador por las circunstancias de la España de entonces.

Estudiaba en Málaga, en las Teresianas, entonces a espaldas de los Agustinos, donde estudiaba su futuro marido y luego estudiarían sus hijos varones. Un día, ya iniciado el golpe militar de Franco contra la República, hubo un incendio en el colegio (estaba allí en régimen de internado). Su padre decidió llevarla de vueltas al pueblo, a Tolox, hasta que todo aquello pasase.
Al cabo, los nacionales (como se llamó al ejército golpista de Franco) tomaron Tolox muy pronto, y mataron, por su alta significación como revolucionario, a uno de los hombres de confianza de su padre para con las cosas de la almazara de aceite y del campo. Aquello lo marcó para siempre y decidió trasladarse a Coín (allí ya habían entrado los nacionales también), donde había quedado vacante una plaza de farmacia. Allí, en Coín, ella conoce a su futuro marido, que al pronto es movilizado por las tropas de Franco como Alférez Provisional interrumpiendo así sus estudios de Químicas en Granada. Es acabada la guerra y terminados sus estudios de Farmacia, tanto en Granada como en Santiago de Compostela, cuando se casan…
Lo demás ya lo he contado alguna vez: tuvo siete hijos; un matrimonio con problemas de pareja de los que nunca habló; quedó viuda muy joven (su marido tenía 51 años) y vio cómo un hijo no quiso seguir con tan sólo 29 años… Pero vio cómo crecían sus nietos, unos nietos que teniendo dos abuelas todos ( yo sólo tuve una; la otra murió antes de yo llegar al mundo) sólo se refieren a ella cuando dicen “mi abuela”…

Murió en octubre del año 2000.
Fue mi madre; es mi madre… Una mujer que sabía que la vida nunca sería fácil; pero que lo tuvo que saber demasiadas veces y demasiado pronto… Y aún así, tenía un sentido del humor extraordinario y siempre estaba sonriendo...
Ojalá algún día pueda hablar de ella sin apenas emocionarme; será entonces cuando vuelva a estar a su lado.

Felicidades, madre…


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