lunes, 3 de diciembre de 2012

MI SANTO

Dice la wikipedia:

"Francisco de Jasso Azpilcueta Atondo y Aznares de Javier, más conocido como Francisco de Javier o Francés de Jasso (7 de abril de 1506 –† 3 de diciembre de 1552) fue un religioso y misionero navarro de la Compañía de Jesús nacido en el Castillo de Javier de la villa homónima y fallecido en la isla de Sanchón (China). Fue canonizado por la Iglesia Católica con el nombre de San Francisco Javier"

Muchos de nosotros, los ateos, los otros, hemos sentido siempre una cierta fascinación por personajes como determinados santos de la iglesia católica, aquella tan contradictoria de beatificar tanto a malvados como a verdaderos seres humanos solidarios y enormemente buenos, como el caso que nos ocupa... Siempre rechacé la utilización mezquina de aquellos malvados que por necesidades del guión inmoral que sustenta el poder de la secta llamada católica llegaron a beatificar sus responsables; pero personajes como Francisco de Javier -que nació en el castillo de Javier (Navarra), en el seno de una familia con posibles y que decidió dejar aquella cómoda vida para irse de misionero a Oriente, donde murió en la China ayudando a sobrevivir a tanta pobre gente- siempre tuvieron y tendrán mi reconocimiento y mi devoción humana. Supongo que irse a las misiones era la forma de rebelarse en la época frente a tanta miseria material y tanta pobreza moral de los entonces...

Cuando vine al mundo me llamaron Francisco Javier; y cada año conmemoramos el 3 de diciembre, día de su muerte en la China en 1552, como el día del santo que la iglesia beatificó más tarde. 
Y ya fui devoto de su figura; y como tal, y al modo navarro, hice una vez la Javierada (peregrinar al Castillo de Javier), pero en coche; aunque desde Málaga, hazaña que habrá que repetir algún día de estos. 

También, todos los años, me acerco, al menos una vez, a Valença, en el norte de Portugal, donde en una capilla (creo que se llama del Buen Jesús) está elevada en peana esta figura de mi adorado Francisco de Javier. Un Francsico de Javier que de haber nacido en el siglo XIX o XX sería un activista rojo, más que un misionero en el Oriente...

Muchas felicidades a todos los javieres de mi vida... 
Y un saludo a la afición...

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