jueves, 10 de octubre de 2019

NUNCA EL OLVIDO

MARTES 8 DE OCTUBRE (13,10 horas)
Hace unos minutos me ha llamado una querida amiga, compañera de la empresa, para darme la noticia. La he buscado y aparece en los medios locales...
Hace unos años me vine al centro de producción de Málaga, tras más de 25 años en la sede de Sevilla. Siempre lo he dicho: los compañeros de Málaga me acogieron como si de toda la vida con ellos. Y entre ellos, Luis Martínez, tan cercano y cariñoso siempre conmigo... Tantas horas conociendo la TV por dentro (los que nos dedicamos a la publicidad sólo sabemos de duración de los spots, de audiencias y de dinero).
Al cabo, hace unos años dejé la empresa, pero no dejé la amistad y el afecto de tanta buena gente...
Hace unos minutos me ha llamado una querida amiga, mi Piluca: —Te tengo que dar una mala noticia... Era Luis... Hace un año o así me dijeron que padecía de cáncer. Lo llamé, le dije que se curaría, como así fue... Y me agradeció la llamada... Y quedamos en que cuando se curase lo celebraríamos ‘comm’il faut’...
Pero no ha sido posible; se curó, sí; y lo nombraron gran Jefe de Producción tras años ninguneado. Y cuando está en su mejor momento, con 55 años, la maldita carretera nos lo ha quitado para siempre...
La vida, esta puta vida que nos acoge en este terrible mundo, a veces se me hace insoportable...
¡Es tan injusta por veces!!!
Querido Luis: nunca jamás te agradecí suficientemente tu acogida en el Centro de Producción de Málaga; tampoco te dije lo suficiente lo que me gustaba entrar en el control central de los programas en directo que realizabas: tu magia como realizador me emocionaba... Y tu buen hacer con los compañeros... Y ya es tarde, muy tarde, para decirte que tampoco nunca jamás te olvidaré...
Descansa en paz; nosotros no podremos ya descansar sin ti.
Hasta siempre, querido Luis...

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MIÉRCOLES 9 DE OCTUBRE (13,30 horas)
"Mi tiempo me ha quitado aquello mío que era más humano"
Rafael BALLESTEROS
(Fernando de Rojas acostado sobre su propia mano (I). Recogido en Rafael Ballesteros Poesía (1990-2010). El Toro Celeste. Málaga 2015)
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Llevo más de 24 horas en silencio. Siempre me sucedió lo mismo: la tristeza me aísla, me recluye, me esconde... Pero me armé de valor y fui a despedir al amigo tan trágicamente ido como inesperadamente cruel...
Vi mucho llanto, mucha tristeza, mucha incomprensión y, sobre todo, mucha compasión y ternura... Pero sobre todo vi muchas miradas idas, sin respuestas, sin saber por qué la vida es tan cruel para con las buenas personas y tan débil para con los malvados...
Nada hay más mío que la buena gente que me ha rodeado a lo largo de mi vida... Una vida que poco a poco me va quitando aquellos tesoros... Y recordé unos versos de mi querido Rafael Ballesteros: "mi tiempo me ha quitado aquello mío que era más humano"...
Hoy hemos enterrado a Luis Martínez, tras el trágico accidente de ayer, su familia, sus amigos, su gente... Nunca es tarde para morir, ese fracaso de la vida; pero es una crueldad hacerlo tan joven y de tan insoportable manera...
Descansa en paz, querido Luis: todos tus compañeros y amigos estábamos allí, con tu gente, desolados y sin saber por qué nos has dejado tan tristes y contrariados... Ahora, cuando al fin la vida te volvía a sonreír y a rescatarte para todos nosotros, tus amigos, tus compañeros, tu familia... Tu gente...
Nunca el olvido...

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