Los que ya estamos en el otoño de nuestras vidas tenemos una cierta propensión marginal a la melancolía...
También los que nacimos en otoño pareciera que siempre estamos conviviendo con una cierta melancolía, la de las derrotas, la de los fervores caídos, la de los desencantos...
Y la melancolía, en mí, siempre me llevó a ciertos paraísos perdidos; quizás nunca existieron y sólo los inventé para poder refugiarme en aquellos paraísos con el propósito de poder sobrevivirme en situaciones límites o indebidamente insoportables...
Así, la música que amo siempre acude en mi rescate; como Matt Monro lo hace esta noche de octubre con este hermoso tema que formó parte de la banda sonora de una de las películas de James Bond, aquella que llevaba el mismo nombre de la canción en uno de aquellos inolvidables, e irrepetibles, 007 de Sean Connery...
También los que nacimos en otoño pareciera que siempre estamos conviviendo con una cierta melancolía, la de las derrotas, la de los fervores caídos, la de los desencantos...
Y la melancolía, en mí, siempre me llevó a ciertos paraísos perdidos; quizás nunca existieron y sólo los inventé para poder refugiarme en aquellos paraísos con el propósito de poder sobrevivirme en situaciones límites o indebidamente insoportables...
Así, la música que amo siempre acude en mi rescate; como Matt Monro lo hace esta noche de octubre con este hermoso tema que formó parte de la banda sonora de una de las películas de James Bond, aquella que llevaba el mismo nombre de la canción en uno de aquellos inolvidables, e irrepetibles, 007 de Sean Connery...
Buenas noches; mañana será de nuevo el mundo...
Ojalá sin tanta melancolía...
Ojalá sin tanta melancolía...
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