YA NO SE ESCRIBEN CARTAS DE AMOR...

Ya no se escriben cartas de amor... Y como decía Pessoa, "todos las cartas de amor son ridículas"...
Pero yo escribí muchas cartas de amor; casi a diario...
También, casi a diario, las recibía...

No éramos adolescentes, sino adultos en distancias. Y sí, a veces eran cartas de amor ridículas, sí... Pero eran cartas sinceras y cargadas de ausencias insoportables...

También las escribí en aquellos meses de la primavera en Francia de aquel 1971, cuando descubrí un país que siempre había sido espejo y proyección desde mi adolescencia cansado, ya desde entonces, de tanta grisura y tristezas...

Como también descubrí a un joven Moustaki que cantaba esta hermosa canción que con los años supe que había escrito en colaboración con otro importante griego, cual Theodorakis... Et voilà una de mis canciones preferidas de Moustaki...

No, ya no se escriben cartas de amor; y sí, muchas de ellas eran ridículas; pero, como también dijo Pessoa, "si no fuesen ridículas no serían cartas de amor"...