jueves, 5 de marzo de 2020

3 de marzo
Tras cumplir con mis deberes de ciudadano abonando los impuestos municipales correspondientes en mi antiguo municipio de Mijas, y siendo esa hora impropia de la tarde para el aperitivo y, como quiera que ya me acercaba en el regreso a Málaga, entré en uno de mis lugares favoritos y eternos por frecuentado y siempre amablemente satisfactorio para con mis vicios y/o virtudes: nunca supe dónde estaba la frontera...
Hablo del Parador de Golf de Málaga, donde tantos días y tantos encuentros en mis años laborales últimos en Málaga... Y donde siempre me siento en paz conmigo y con el mundo, a pesar de tanto pesar y de tanto aún por pesar, pasando cuando toque pasar: el futuro nunca existió, salvo como consuelo. Y hoy ya es el futuro para muchos de nosotros.
P.D. Tomo cerveza, pan con aceite de Estepa, aceitunas de Antequera y una pequeña tabla de quesos malagueños variados, al romero del Guadalhorce, al pimentón extremeño, o al modo rondeño-payoyo...
Y levito...........


4 de marzo
Hoy fue un gran día con el hermano Miguel por Málaga...
Llegué hasta su casa andando (despacito por las rodillas y cadera), y nos tomamos la mejor Viña AB (gazpachuelo con el vino Viña AB) de Málaga...
"Nerva" se llama el restaurante, en Cristo de la Epidemia... Y luego tomamos café en el Compás de La Victoria, en el restaurante Montana, donde un soberbio patio y un exquisito lugar...
Y regresé, en la tarde, a casa andando también...
A veces la vida...





No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentarios