miércoles, 22 de julio de 2009

ANTES DE DORMIR...

Cada noche, antes de dormir, recostado en la cama articulada de Bormujos, leo los diarios de Sándor Márai. Y cada párrafo, cada palabra, me sobrecogen sobremanera... Definitivamente, estamos ante uno de los grandes... ¡Qué no hubiera dado la Europa del Este sin la implantación del régimen comunista de posguerra!...
Y dice Márai, el 20 de enero de 1984:
"Por la noche leo para L. (su mujer) las plagas de Egipto. El sadismo de la historia sagrada es crudo y abierto, inclemente. El Señor "endurece" el corazón del faraón para que retenga a los judíos en Egipto, pero ¿por qué? De la misma manera podría inclinarlo a la misericordia, ya que está en su mano hacerlo. Plagas, tinieblas, peste, langostas, moscas, granizo... todo podría evitarse si el Señor, por el bien del pueblo elegido, decidiera actuar con medios pacíficos, sin masacrar y castigar al pueblo judío. Sin embargo, lo masacra y castiga hasta la séptima generación, tras "endurecer" el corazón del faraón una y otra vez... Este Dios judío es bien extraño."
Y dice entre el 4 de enero y el 4 de febrero de 1986:
"L. ha muerto"
"Hoy hace cuatro semanas que murió... Me quedé media hora más junto a su lecho, contemplándola. No estaba seria ni hermosa, sólo diferente. Como si el maquillaje de la vida -ira, dolor, alegría, tristeza-, todo lo que reviste el rostro humano, se hubiera borrado. Sólo capté en ella serenidad y nobleza, dos rasgos que siempre quedan ocultos en la cara de los vivos".

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentarios