martes, 30 de agosto de 2016

NO OLVIDO Y NO PERDONO

No olvido -y no perdono- que hace unos meses se pudo haber iniciado en España una regeneración política de calado, pero unos impostores siguieron jugando a los tronos en vez de jugar a la vida y al futuro de todos nosotros, los españoles.
Tampoco olvido la pinza mediática que, alentada por empresarios franquistas y por comunistas que contra Franco vivían mejor, sólo buscaba aniquilar toda posibilidad de aquella regeneración política que se nos presentaba como la mejor de las oportunidades tras el 20-D de 2015.
Y entre todos aquellos dijeron NO a un gobierno de cambio; y todos aquellos dieron, por tanto, lo que he llamado un golpe de estado civil, como ya antes lo dio aquella señora en Madrid cuando se repitieron unas elecciones por mor de que los líderes políticos del PP de Madrid no aceptaron el resultado electoral al no ser de su conveniencia; y eso se llama 'GOLPE DE ESTADO CIVIL'.
No, no olvido ni perdono; no olvido aquella pinza PP-Podemos que buscaba sólo satisfacer egos personales aniquilando al PSOE, como tampoco olvido que la ciudadanía española dejó mucho que desear con su actitud poco crítica para con los enemigos de la democracia; dicen que los pueblos tienen lo que se merecen, y ese dicho cobra toda su fuerza cuando es el pueblo, con su voto, el que decide su futuro.
Por tanto, el PP sigue siendo franquista en tanto no aceptó el resultado democrático al no presentarse a la investidura el líder de su partido, partido que fue más votado, buscando así el golpe de estado civil de repetir las elecciones; y Podemos, su aliado natural en el golpe de estado tras la pinza de la que hicieron gala ya antes, jugando a los tronos, nunca fueron de fiar; y así, fagocitó toda sombra de su espacio político (IU), aunque fracasó en su intento de sorpasso al PSOE; un fracaso que desde 1977 trae de cabeza al comunismo español tras arrebatarle el PSOE el liderazgo político de la izquierda española.
En suma, no olvido ni perdono tanta traición de los dirigentes políticos del PP y de Podemos, como tampoco de la ciudadanía que dicen representar. Una ciudadanía que ha demostrado su minoría de edad, toda vez sigue siendo asustadiza, franquista sociológicamente y fanfarrona tras la larga dictadura que dejó la guerra civil.
Mañana se inicia un nuevo ciclo de fanfarrias. Al menos el líder del partido ganador se ha decidido a presentar su candidatura, algo es algo; pero no tiene asegurados los votos en primera votación (mayoría absoluta); ojalá en segunda obtenga la minoría suficiente para pasar página de una vez por todas a esta impresentable situación de un país arruinado, con tasas de paro escandalosas, intervenido por la UE y sin un futuro ni siquiera incierto por delante, y jugando a los tronos en vez de tener ya un gobierno tomando decisiones que urgen.
Para ello debería el señor ausente buscar apoyos entre sus aliados naturales y acabar con los puentes rotos con los nacionalismos periféricos, y reconvertir, así, la situación de aquellas Españas…
De lo contrario, sólo queda que de nuevo el único partido decente y decidido para con el bienestar y el futuro de los españoles tome las decisiones que, por el bien de todos, estoy convencido de que tomará antes que volver a consentir un nuevo golpe de estado civil.
No, no olvido ni perdono.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentarios