martes, 8 de diciembre de 2009

LOS ÚLTIMOS UTÓPICOS


Hace unos días bajé una foto de un periódico digital en la que se veía a un grupo de miembros de las brigadas internacionales entrando y desfilando por las calles de Barcelona en 1936, foto que tengo de fondo de escritorio como homenaje a, quizá, los últimos utópicos del mundo contemporáneo. De toda condición; de toda cultura; sólo una cosa les unía: el temor de que, si España caía en manos de Franco, sería inevitable la segunda guerra mundial, como así fue. Por eso vinieron, para luchar por la democracia en Europa, no sólo en España. Y conmueve ver cómo aquellos hombres lo dejaron todo para salvar la democracia española de las manos de un traidor a la República, como lo fue Franco, y de un asesino que gobernó dictatoriralmente nuestro país durante cuatro espantosas décadas.
Hoy, en Teseo, compré un libro de Humphrey Slater titulado LOS HEREJES (Galaxia de Gutenberg-Círculo), donde se relata el auge del totalitarismo -religioso y político- y las consecuencias del fanatismo. El autor, inglés, habla con mucho conocimiento de causa: fue uno de los brigadistas que sintió la llamada de España, aunque su paso por nuestro país acabó siendo la causa de su desencanto del comunismo. Vuelve a Gran Bretaña y es calificado de subversivo por las autoridades de su país.
Muere en España en 1958, en extraña y ocultas aún circunstancias, mientras escribía sus memorias...
Muchas veces pienso en esta gente utópica que vino a España a parar el fanatismo, el totalitarismo, el fascismo y la miseria y la guerra... No lo pudieron evitar, pero más lamentable es aún ver en qué se ha convertido aquella restauración de la democracia tras 31 años de libertades públicas, por ejemplo, en España: un enorme lodazal de mangancia; un inmenso desierto cultural; y un impresentable uso y abuso de las instituciones democráticas, aún en la primavera de sus vidas institucionales...
¡Si aquellos ilusos utópicos levantaran la cabeza!...

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentarios