lunes, 8 de julio de 2019

ELECCIONES EN GRECIA

A Tsipras le ha ocurrido lo mismo que a ZP: se lo ha llevado la gestión de la crisis con las políticas marcadas desde la UE, con un agravante: Grecia era un país fallido. Y ha habido que aplicar ajustes dolorosos para las clases medias, clases que en el mundo de hoy son las que sostienen los estados del bienestar: ricos hay pocos (es verdad que son muy ricos), pero pocos, y, en cualquier caso, disponen de ingenierías financieras suficientes para no pagar los impuestos que les corresponden y cuando se detectan sus fraudes han prescrito o los amnistían como hizo Montoro para blanquear el fraude a precio de saldo...
Y es que la izquierda tiene pendiente un déficit: saber gestionar el sistema en tiempos de crisis... La izquierda necesita ciclos expansivos para repartir aquella riqueza vía presupuestaria: ingresos suficientes y eficientes que sostengan el estado del bienestar y los servicios públicos básicos; la derecha no necesita ciclos expansivos de la economía; en los ciclos recesivos, se siente cómoda y sin escrúpulos para hacer los ajustes que la izquierda no se atreve a hacer porque su base electoral se le revela... Y al final, aquella izquierda, inevitablemente tiene que hacer algunos ajustes a regañadientes y al cabo es desalojada del poder; entre otras cosas, porque no termina de explicar el por qué son necesarios aquellos ajustes y la conveniencia de aliarse con su base electoral a través de una fluida y clara verdad comunicativa

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