viernes, 1 de julio de 2016

¿SÍNDROME DE ESTOCOLMO?

Es curioso cómo el Síndrome de Estocolmo ha reaparecido en alguna parte de la izquierda española ante el resultado electoral obtenido por Podemos, resultado que no es el esperado por estos y que ha consolidado al PSOE como el partido hegemónico de la izquierda en España y señalándole su camino a corto plazo, cual es el de la oposición...
Podemos, o mejor, su salvapatrias, tuvo una oportunidad de oro; pero no se subió al tren del 20-D, quizás el mejor tren que ha habido en España en los últimos tiempos para haber iniciado un viaje sin retorno hacia la modernización que necesitan todas las instituciones de este país.
Y no quiso subirse al acuerdo PSOE-C's porque vio frustrada su hegemonía dentro de la izquierda y, en connivencia con el gallego ausente que dice que ha sido Presidente en funciones, provocó el repetir las elecciones, cosa que ha venido muy bien al ausente huido y que sigo considerando como un golpe de estado de los partidos políticos que han forzado repetir las elecciones, toda vez era rechazar la voluntad popular tal cual fue expresada, creyendo así que en estas segundas elecciones del 26-J se produciría al fin el deseado sorpasso al ir conjuntamente con IU desde aquel 15 de junio de 1977.
No ha pasado una semana siquiera desde aquel 26-J y ya hay mucho Síndrome de Estocolmo por parte de los que han sufrido el desdén del salvapatrias. Y así acabo de ver una propuesta de ofrecimiento a Podemos para que apoye a Sánchez sin condiciones, contando además con el apoyo de Ciudadanos...
Honestamente creo que ese tiempo ya ha pasado; sobre todo, porque con trileros no se va más que a precipicios desconocidos. Lo mejor que hace el PSOE es dejar que el partido que ha ganado intente gobernar y pasar a la oposición; eso sí, negociando cada ley y condicionando sus contenidos. Y a esperar que los locos fracasen hasta el olvido y los desalmados entren en razones.

Con trileros y falsarios nunca puede gobernar el PSOE. Bastantes errores ya ha cometido como para precipitarse al vacío de nuevo.

P.D. Por cierto, muchos de los padrinos de esta propuesta se autoproclaman de izquierda socialista... Eso del enemigo dentro de casa...

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